9 eco formas de ahuyentar a las plagas
Hay un montón de razones por las que es mejor utilizar pesticidas caseros (al menos en un primer momento) que pesticidas hechos en un laboratorio. Los productos químicos es mejor dejarlos para los profesionales ya que si no tenemos mucha idea del tema, podemos, tratando de arreglar un problema, crear otro peor.

Aquí tenéis varios pesticidas hechos en casa que no fastidian el medio ambiente y que pueden ser igual de eficaces que los no naturales. Os recomiendo que, antes de llamar a nadie para que venga a “desplaguizaros”, probéis alguna de las mezclas que os propongo a continuación 😉
Jabon y agua
Uno de los pesticidas más seguros y efectivos es la mezcla de un par de gotas de lavavajillas y agua. Básicamente, el jabón irrita a la mayoría de las plagas y las obliga a irse.
Espray pica pica
Este pesticida es fuerte así que si tenéis un bicho de los que no se van ni pidiéndoselo de rodillas apuntad: remojar en dos litros de agua durante una noche media taza de guindillas, media taza de hojas de menta fresca, media taza de rábano picante (hojas incluidas) y media taza de tallos de cebolla tierna. Colar y guardar el líquido. Añadir una cucharada sopera de jabón para platos y ¡listo!
Sal y agua
Si os enfrentáis a un problema como los gusanos de la col o los ácaros, tendréis que aumentar los niveles de sodio lo suficiente como para que el lugar les parezca mal aliñado y se larguen indignados. Dos cucharadas de sal por litro de agua y a rociar las plantas sin miedo.

Espray de aceite y jabón
Mezclar una taza de aceite vegetal, una cucharada sopera de jabón para platos y dos tazas de agua.
Amoníaco pulverizado
Yo no abusaría mucho de esta mezcla ya que huele un poco mal y puede causar efectos negativos si se utiliza demasiado. Mezclar una parte de amoníaco por 7 partes de agua y rociar la parte infectada. La mayoría de insectos huyen de esta fórmula.
Espray de cítricos
Dejar en remojo una taza de cáscaras de limón o naranja, media taza de hojas de menta y un cuarto de taza de hojas de lavanda en unos 4 litros de agua durante una noche. Colar, guardar el líquido y añadir una cucharada sopera de jabón para platos.
Té de ajenjo
Si tenéis problemas con las polillas, babosas o caracoles el té de ajenjo os irá que ni pintado. Hervir un cuarto de kilo de hojas de Artemisia picadas (ajenjo común) en 2 litros de agua durante 30 minutos. Verter el resultado en una botella de espray con 4 litros de agua fresca.

Azúcar y ácido bórico
Si os encontráis luchando contra un ejército de hormigas y veis que la cosa se pone difícil, mezclad una parte de azúcar por una parte de polvo de ácido bórico y espolvoreadlo cerca de vuestras enemigas. La batalla es vuestra.

Cebollas, guindillas y ajo
Si lo que realmente queréis es un buen bombazo lo que tenéis que hacer es moler 3 cebollas grandes, 3 chiles y un manojo de ajos, y mezclarlos con 4 litros de agua. Se deja reposar una noche, se cuela y se le añade al líquido restante agua fresca hasta volver a tener 4 litros.
Estas mezclas debéis aplicarlas por toda la superficie de la planta asegurándoos de no dejar ninguna parte sin rociar donde los insectos, etc. puedan esconderse.
Y si después de probar alguno de los mejunjes de arriba veis que no funciona, siempre podéis llamar a un “desplaguizador” para que con sus productos químicos u orgánicos, que también existen, acabe con vuestros problemas…

¡Suerte!